Alquileres de Vivienda e Ingresos

Una de las preguntas más recurrentes en Bolivia es si existe o no una burbuja inmobiliaria que vaya a estallar pronto. Es decir, si los precios de inmuebles caerán fuertemente en un corto plazo. En primer lugar, es bueno tener en cuenta que el precio de los Alquileres ha crecido de forma similar al PIB per cápita. Esto demuestra que a medida que los ingresos de la población han ido en aumento, los alquileres han seguido un comportamiento similar. Entonces, no habría síntomas de una burbuja, ya que de ser este el escenario, se tendría un incremento de precios más rápido que el PIB.

Los Alquileres tuvieron un crecimiento anual de +6,8%, mientras que el PIB per cápita lo hizo en 8,2%. De hecho, se observa que los ingresos desde 2018 se han mantenido relativamente estables debido al bajo crecimiento del PIB, lo que aparentemente se ha traducido en un estancamiento del precio de los Alquileres de Vivienda.

A raíz de la pandemia, se espera que el PIB per cápita se contraiga en al menos 7% en 2020. En este entorno, se podría esperar que el precio de los inmuebles también disminuya. De hecho, observando la evolución de precios de Alquileres por ciudad, se obtiene que Santa Cruz muestra una contracción de 12% en 2020, mientras que en La Paz se tiene un leve incremento de 0,9%.

El factor que más influencia podrá tener en el precio de los inmuebles en el corto plazo es la magnitud de las reprogramaciones de cartera de préstamos de vivienda. Si la mora es muy alta, los bancos tendrán que liquidar inmuebles para recuperar los recursos prestados, lo que podrá influir en la oferta de viviendas a la venta y consecuentemente en sus precios. Si, por otro lado, la banca logra crear políticas de reprogramación más flexibles para las personas, se podría esperar una menor necesidad de ejecutar créditos en mora. En este mundo, será importante el rol de ASFI en delinear las políticas prudenciales en el Sistema Financiero y el impacto esperado en el precio de los inmuebles.